He tenido el honor de recibir en este mismo día, y me apresuro a contestar, la muy estimable comunicación que V. SS. se han servido dirigirme, con fecha 26 del pasado, y por acuerdo de la Presidencia de la H. Convención Nacional, contraida a recabar la pronta remisión de la Memoria de la Secretaría General del ex-Jefe Supremo del Guayas, que estuvo a mi cargo, por haberlo así pedido la Comisión de Legislación. Mi mayor deseo habría sido tener listo ese informe para presentarlo al instalarse la H. Convención; y así habría sucedido si me hubiera conformado con decir a esa augusta Asamblea: el Gobierno del Guayas ha funcionado ochenta y seis dias sobre los escombros dejados por la Dictadura y por la guerra, y este corto espacio de tiempo, que absorbían las premiosas atenciones de la situación, apenas ha bastado para hacer un poco de luz en el caos; y habría sido, además, necesario truncar en alguna parte el cortísimo período en que me cupo desempeñar ese honrroso encargo.