La inseguridad en estos últimos 6 años ha traspasado fronteras y ha sido un gran desafío para el Estado ecuatoriano. La realidad en los años 2017-2021, supera la capacidad de acción del gobierno, afectando a la ciudadanía y creando una sensación de inseguridad. La falta de acción y la ineptitud del gobierno en aspectos de seguridad han llevado a un acelerado aumento de los índices de delincuencia. Según mencionan varios expertos en seguridad en el país se percibe una criminalidad desbordada y fuera de control. En base a los antecedentes el Estado ecuatoriano mediante sus instituciones de control se han visto en la necesidad de establecer relaciones diplomáticas con otros Estados para cooperar entre sí, unir fuerzas para combatir la delincuencia y restablecer la seguridad ciudadana. Dicha Cooperación Internacional compone un rasgo específico de la dinámica global de establecer relaciones de política exterior de cooperación ya sea de manera bilateral y multilateral, reembolsable y no reembolsable, para lograr un propósito en común: combatir la inseguridad.