Se conoce que, entre los principales nudos críticos que atraviesan las ciudades está el incremento de la violencia urbana y los altos niveles de percepción de inseguridad de las mujeres en los espacios públicos. La violencia de género está presente en el ámbito público y en el ámbito privado y a pesar de ser reconocido como un problema social, que se encuentra en la agenda política, las mujeres continúan siendo objeto de acoso sexual, insultos, agresiones sexuales y muchas formas de violencia en el espacio público, dificultando su acceso pleno a la ciudad. La presente investigación se desarrolla en torno al debate de ciudades seguras, destacando que desde la teoría crítica feminista la configuración de las ciudades no es neutral al género y existen condiciones de desigualdad en los espacios públicos, además de relaciones asimétricas de poder y divisiones de género que influye significativamente en la forma en que las mujeres experimentan y participan en el espacio público, así como incide en la concepción de habitar la ciudad.