Descripción:
EI Salvador dio sus primeros pasos en el nuevo siglo de forma verdaderamente traumática. La "integración monetaria", como de forma engañosa se denominó a la decisión política de dolarizar la economía despojando al país de su capacidad para definir instrumentos de política monetaria, parecía ser el hecho central destinado a mover y definir los escenarios de EI Salvador en el futuro mediato e inmediato. Ello, sin embargo, no sucedió así. Trece días después de la entrada en vigencia del sofisma de la "integración monetaria", un terremoto de fuerte intensidad agitó el territorio salvadoreño, transformando y trastornando la vida de todas y todos sus habitantes. La pobreza y la tragedia se reacomodaron inamovibles en su mejor vitrina para no dejar espacio a dudas sobre la vulnerabilidad social y ambiental a la que han contribuido con fuerza los estilos de crecimiento económico que se han ensayado en el país, así como una planeación urbana de criterio exclusivamente rentista que ha soslayado criterios de seguridad humana y de conservación ambiental. La tragedia, tampoco dejó dudas sobre la incapacidad de la institucionalidad estatal para responder oportuna y apropiadamente a los retos planteados por el evento telúrico.