Descripción:
Esta investigación examina la convergencia geoestratégica en el ciberespacio de un nuevo G-2 ruso-chino, que promueve una transición de poder global entre 2014 a 2023. La importancia del estudio radica en el análisis de un fenómeno emergente que transforma las dinámicas tradicionales de poder tecnológico, en un contexto de competencia por el dominio del ciberespacio. La brecha de investigación se centra en cubrir la falta de estudios que exploren cómo la cooperación cibernética entre Rusia y China no solo responde a sanciones occidentales, sino que establece los cimientos de un nuevo bloque geoestratégico, que desafía la hegemonía tecnológica y militar de Estados Unidos. El objetivo principal es comprender la convergencia geoestratégica en el ciberespacio, y cómo esta cooperación promueve un nuevo G-2 ruso-chino en la transición de poder global. La metodología empleada es cualitativa, y está basada en el método de rastreo de procesos.