En armonía con lo dispuesto en el artículo 94 de la Carta Política de la República, me es sumamente grato llevar a conocimiento de vosotros y, por vuestro intermedio, a la Nación, el informe de las labores desarrolladas por el Departamento a mi cargo. Altamente distinguido por el señor doctor don Carlos Arroyo del Río, al llamarme a colaborar desde el comienzo de su Gobierno en la delicada Cartera de Obras Públicas y Comunicaciones, acepté gustoso la invitación, con la seguridad de que mi patriótico entusiasmo procuraría corresponder a la confianza que en mí depositaba el nuevo Mandatario, quien aportaba al Poder, además de su indiscutible capacidad y sólido prestigio, el más sincero y decidido afán de propender con eficacia a la reconstrucción nacional.