Descripción:
En la presente obra, Carina Kaplan y Ezequiel Szapu abordan el papel de las emociones en la configuración de los fenómenos de violencia en la escuela. Parte del supuesto de que las emociones no pueden entenderse desde una visión reduccionista, en donde prevalezca sólo lo biológico como un componente fundamental. Para entender qué son las emociones, hay que vincularlas con su conformación en lo cultural y en lo social. Es decir, en su íntima relación con la intersubjetividad producida a través de las interacciones entre seres humanos en estrecha convivencia. De esta forma, las emociones se configuran mediante la percepción personal y social del cuerpo, cuya aceptación o rechazo, se determina según ciertos esquemas culturales establecidos.