Descripción:
En un país como Colombia, donde se mata tan rápido y laperfidia es normal, la reporteria judicial ha quedado, con excepciones, en manos de mercachifles del periodismo de las morgues que han vulgarizado un género que agoniza en silencio por exceso de cadáveres. Estas son algunas de las opiniones que el autor nos plantea en este recorrido crítico y punzante de lo que ha sido y es la crónica policial en su país.