Descripción:
Los historiadores serán los encargados de componer un cuadro completo de la perestroika. Pero el pueblo dirá si funcionó o no. El autor reconoce que los rusos "Sabemos que necesitamos, conocemos nuestras demandas. Pero ignoramos cómo satisfacerlas. Vamos a suponer que mañana establecemos una economía".
de mercado completamente libre.
Vendría el caos, el desempleo, una pauperización progresiva de las capas de la población más pobre. Las consecuencias serían imprevisibles. Pero si limitamos la economía de mercado, si intentamos combinarla con la planificación,
nos veremos como entre dos sillas. No podremos aprovechar ni las posibilidades de la planificación, ni las del mercado...