Descripción:
Las cifras suelen tener en América Latina un avasallador poder de revelación. Si decimos, por ejemplo, que existen 174 escuelas de comunicación en la región, nos situamos en un porcentaje desmesurado en relación con el resto de los países del Tercer Mundo. Pero si añadimos que de 79 de esas 174 habían egresado, a 1982, 67.682 almas, los números tienden a acercarse al paroxismo. Y sí insistimos en el vértigo y señalamos que en 111 de esos establecimientos, al mismo año, habían 50.450 estudiantes, las impávidas cifras amenazan con hacer estallar nuestra capacidad de creer.