Descripción:
La transición que el Ecuador emprendió en 1978 fue programada por varios actores políticos y ejecutada por la Junta Militar, con el objeto de ser lo menos convulsionada posible e instaurar un institucionalismo formal a través de una nueva Constitución que recogiera los procesos de reforma social y económica que se habían iniciado en la primera etapa de la dictadura militar (1972-76) y que consolidara el devenir modernizador hacia el estado neoliberal donde tuvieran cabida las agendas corporativas de los nuevos actores políticos. En ese escenario -y a punto de enfrentar una transición hacia la democracia representativa, la ampliación de la masa electoral es un punto de quiebre cuyo análisis es sumamente importante para la comprensión de la fenomenología política posterior.