La moda como sistema está compuesta por tres fases: producción, creación y exhibición, y la ciudad de Quito desde los años 80 ha intentado fortalecer cada de una de estas con varios esfuerzos creando marcas nacionales que han crecido a lo largo del tiempo y de acuerdo al avance de las tecnologías y los canales de comunicación. Luego de 30 años de lucha constante, de la instauración de boutiques privadas en las cuales diseñadores de Guayaquil y Quito confeccionaban trajes de gala, para mujeres de clase media alta y alta del país, y cuya opción publicitar sus emprendimientos era únicamente a través de canjes para vestir a reinas de belleza.