Descripción:
VOY á hablar otra vez: mas ¿para qué he de hablar de nuevo? — Parece inútil hablar; y sería, talvez. mejor, en las presentes circunstancias, guardar profundo silencio, esperando, con tranquilidad, que la Providencia divina tome por su cuenta defender por sí misma la causa de la religión católica, que es la causa de Díos; pero, no.