Descripción:
En las últimas décadas la lactancia materna ha vuelto a tener una gran importancia. Son muchas las mujeres que la eligen y los sectores de salud la recomiendan como el mejor alimento, en forma exclusiva, hasta los seis meses de vida y, junto con la alimentación complementaria, hasta los dos años. Sin embargo, es una práctica extremadamente exigente y con altas tasas de abandono, en especial en aquellas mujeres que también trabajan fuera del hogar. Frente a esto, aparece una sensación de culpa, fracaso e impotencia, una suerte de obligación no cumplida que nos preocupa como profesionales de la salud y nos alerta para revisar nuestras recomendaciones o las formas en que estas son impartidas a la comunidad.
Los objetivos de este trabajo de investigación son, por un lado, explorar la decisión de la mujer que amamanta, así como la construcción de la idea de maternidad desde el enfoque de la autonomía relacional y evaluar las posibilidades reales de las mujeres a la hora de amamantar. Por otro lado, analizar la relación entre las y los profesionales de la salud y las mujeres, en el marco de estas decisiones, así como evaluar la evidencia que sostiene las recomendaciones y el rol de los primeros en la promoción de la lactancia. Por último, analizar si por los beneficios de la lactancia en la salud de niñas y niños, las madres tienen la obligación moral de amamantar.