Descripción:
El sujeto humano está marcado indefectiblemente por las palabras del Otro que, desde la primera infancia, estructuran su pensamiento, definen su identidad y le otorgan un lugar simbólico en su grupo. Está inmerso en las relaciones de producción y de trabajo que aseguran su sobrevivencia y en los discursos políticos que organizan el lazo social y el sentimiento de participación cultural. Sin embargo, los discursos se adaptan a los aconteceres de la Historia con nuevas ideologías que modifican las estructuras subjetivas.