En la tesis relaciono –desde la historia de los desastres y la historia cultural de las fiestas– el terremoto del 5 de agosto de 1949 y la Fiesta de la Fruta y las Flores en Ambato, ciudad intermedia y andina de la serranía ecuatoriana. En este vínculo exploro el momento de liminalidad o estado de tránsito que inicia con el terremoto y finaliza con la celebración de la primera Fiesta en 1951, señalando que durante esta fase se sortean varias miradas de la reconstrucción observables en los ritos y en las ciencias sin llegar a un consenso. Mi intención no es ver tan solo qué sucedió en el estado de transición sino, reflexionar en qué medida estas miradas arrojan luces sobre el entramado social. Es decir, busco entender cómo se descomponen y reconfiguran las relaciones sociales después del terremoto logrando la conciliación de la reconstrucción únicamente a través de la invención de una fiesta