Descripción:
En el actual periodo, la conflictividad socio-política se mantuvo dentro de una tendencia media-baja, la misma que principalmente estuvo circunscrita a las instancias estatales. Las respuestas por parte del Estado en su conjunto siguen siendo débiles y no han dado solución a las problemáticas económicas, políticas y sociales que demandan varios sectores del país. Los temas de seguridad ciudadana, el desempleo y el no cumplimiento de los acuerdos alcanzados en las mesas de diálogo entre Gobierno y movimientos sociales, así como de financiamiento para mejorar la atención y servicio en el sector público, alimentan la inconformidad social, repercutiendo en la legitimidad y el apoyo con el que cuenta el gobierno del presidente Guillermo Lasso.