Descripción:
En el norte de la Patagonia Argentina, predomina el clima árido. Las escasas precipitaciones hacen que el riego sea indispensable para la agricultura. Desde hace unos 100 años, en los valles de la Provincia de Río Negro, se desarrollaron desde el Estado sistemas de irrigación posibilitando la producción de manzanas y peras para exportación junto a la familia chacarera de inmigrantes europeos. Esta actividad productiva de pequeña y mediana escala hoy se encuentra en crisis. En las chacras abandonadas comienzan a aparecer cultivos hortícolas diversificados para el abastecimiento local, realizados mayormente por familias migrantes de origen boliviano. Este sujeto ‘otro’ que irrumpe en el territorio y participa de la actividad productiva-alimentaria pone en cuestión el ideario civilizatorio asociado al sujeto legítimo del territorio irrigado de estos valles (masculino, heterosexual, europeizado, de clase media, “padre” de familia chacarera). Aparecen reacciones xenófobas y discriminatorias. El acceso y uso al agua de riego no escapa a esta dinámica, más aún, se vuelve epicentro de conflictos. Surgen así las siguientes preguntas: ¿Qué posiciones, en relación al uso y acceso del agua, ocupan hoy los “chacareros” y los nuevos sujetos sociales que realizan horticultura?, ¿Cómo se entablan las posiciones y desigualdades en la disputa por el agua de riego?, ¿qué rol cumple el Estado y las instituciones?,¿Cuáles son las prácticas de los diferentes sujetos sociales agrarios (horticultores- chacareros) y su lógica (sentido práctico) en torno al uso y acceso al agua de riego?. Para abordarlas, me propongo un abordaje de tipo cualitativo, con una estrategia de estudio de caso y un diseño flexible. Incorporando así aspectos de las prácticas sociales cuya complejidad y sentido situado son imposibles de ser subsumidos a datos estadísticos y pasibles de ser analizados desde un abordaje con ingredientes etnográficos.