Descripción:
El acceso a la vivienda digna por parte de los sectores populares, representa un problema para el Uruguay al igual que para muchos países de América Latina. En este país el derecho a la vivienda digna está garantizado en la Constitución de la República desde el año 1937, lo cual es ratificado en la Constitución de 1967; pero el año 1968 representa un año bisagra en este aspecto, ya que se promulga la ley Nacional de vivienda, a partir de la cual se crea el fondo nacional de vivienda que será la estructura financiera fundamental para las políticas de vivienda. Sin embargo, las políticas de vivienda han tenido
discontinuidades, avances y retrocesos, y como saldo, un sector de la población que no accede a la vivienda digna a través de las posibilidades del mercado y tampoco es alcanzada por las políticas de vivienda que propone el Estado. Frente a este déficit surgen alternativas por parte de los sectores mencionados, una de las más conocidas el sistema cooperativo, cuyas modalidades y posibilidades se describen en este trabajo. Aun así, hay un sector de la población que no logra acceder a la vivienda digna. Dicho sector está compuesto por personas y familias de escasos ingresos, con una relación de informalidad o precariedad con el mercado laboral. Estas personas constituyen los asentamientos irregulares, es decir, la ocupación de terrenos, ubicados generalmente en la periferia de la ciudad, en donde construyen sus precarias viviendas, lo cual conlleva a otra cantidad de precariedades que se manifiestan en la vida cotidiana y se acrecientan y profundizan con el paso del tiempo. Frente a esta realidad, el Estado interviene con políticas que tienen como objetivo regularizar los asentamientos y mejorar las condiciones de habitabilidad o relocalizar a aquellas familias que habitan en terrenos contaminados o inundables. En la presente tesis se aborda el tema de las relocalizaciones de asentamientos irregulares en Montevideo. Se han encontrado varios antecedentes de estudio sobre este tema, de los cuales se desprende principalmente la idea de las relocalizaciones como procesos que trascienden la mera mudanza de un grupo de familias, y a la vivienda como único objetivo de las mismas. Esto coloca de relevancia al territorio, a los procesos que allí se dan, a su dimensión material y simbólica, y a la apropiación de los espacios como parte constitutiva del habitar. La producción social del hábitat (PSH), y el derecho a la ciudad, aparecen como alternativas a los procesos de exclusión y segregación territorial característicos de las sociedades modernas, y de las lógicas de mercado que rigen a las mismas.
Dicho abordaje se realiza a través del estudio de caso de la relocalización del asentamiento “Villa del Chancho” de Montevideo. Se pretende a través de este caso aportar a la mayor comprensión de los procesos de relocalización en general. El mismo presenta la particularidad de no pertenecer a ninguna política pública de vivienda, sino que se trata de una iniciativa de la Sociedad Civil. Se analiza el contexto de las políticas destinadas a la intervención en asentamientos irregulares en el período de tiempo estudiado (2004-2018), para identificar los motivos que llevaron a que sea la Sociedad Civil que asumiera la relocalización. La relocalización de Villa del Chancho se implementa a través de dos proyectos: la construcción de las viviendas a través de la creación de una cooperativa de vivienda y la creación de un Centro Educativo (Los Tréboles), para acompañar a las familias relocalizadas. A través de técnicas cualitativas de recolección de datos, principalmente las fuentes documentales y la entrevista en profundidad se realiza la reconstrucción del proceso, identificando etapas, actores y recursos. Luego se analiza la implementación de la relocalización para finalmente indagar sobre la incidencia del proceso de relocalización en el habitar de las familias una vez relocalizadas. De este trabajo se desprende la relevancia de los procesos en las relocalizaciones. Estos implican el compromiso de los actores involucrados y la articulación entre ellos. También aparece el voluntariado y la sociedad civil como actores privilegiados para favorecer los espacios de encuentro y la creación de vínculos estrechos con las familias a relocalizar. El encuentro y el intercambio posibilitan la construcción de un nuevo espacio y de nuevas significaciones. La participación y toma de decisiones aparecen como elementos centrales para la apropiación del proceso de relocalización por parte de las familias. Otro aspecto que aparece como relevante es en el proceso de relocalización estudiado, es el acompañamiento a las familias, y el rol de las Instituciones como nexo entre las familias que son relocalizadas y las que ya se encuentran en el territorio. En el caso que aquí se estudia, el trabajo conjunto entre la Escuela y el Centro Educativo Los Tréboles, son fundamentales en el acompañamiento de las familias relocalizadas, y en la generación de propuestas y espacios de socialización, recreación e intercambio. Los espacios de participación y toma de decisiones, los espacios de encuentro entre los actores involucrados, la posibilidad de intercambio entre diferentes sectores de la sociedad, la autoconstrucción de las viviendas, el acompañamiento a las familias antes, durante y luego de la relocalización, la articulación con el territorio receptor, hacen de la relocalización de Villa del Chancho, una experiencia que nace del reclamo de la vivienda digna, y transita un camino hacia el derecho a la ciudad.