Descripción:
Salón de la Real Audiencia (decoración y mueblaje lujosos y de la época).
Asistentes 1, 2 y 3 (este último con un plumero en la mano, aparece limpiando los muebles de la habitación; los otros dos sentados en un sofá. En una mesa central se encuentran papeles dispersos y recado de escribir).
Asistente 1: —Bien decía yo que los vientos de verano son indicios de mal agüero; pues al parecer se preparan escenas un tanto luctuosas.
Asistente 2: ¿Qué? ¿Te molestan esos vientos? ¿Temes acaso que te arrebaten como a una pluma, porque eres muy liviano? En ese caso, cuenta con mis fuerzas.
Asistente 1: Vaya una gracia, señor asistente, ¿me tienes por un cobarde, verdad?