Al cumplir tres años de gestión, la actual Administración, presenta conforme el mandato legal, su informe de rendición de cuentas, acumulado y pormenorizado con los logros alcanzados durante el período. El informe se estructura en tres partes: una primera que plantea algunos elementos de reflexión sobre la gran transformación del distrito-región que tiene su correlato en elementos de análisis cualitativo, que en su conjunto permiten visibilizar el gran salto que ha experimentado Quito, ubicando como principal impulsor la recuperación de la autoridad y la institucionalidad pública.