Los problemas de gobernabilidad democrática en el sistema político ecuatoriano y sus consecuencias sobre la estabilidad de los distintos gobiernos han sido dos constantes que han marcado la historia política del Ecuador. El retorno a la democracia en 1979 llegó de la mano con un nuevo marco constitucional que buscaba evitar las crisis de estabilidad política del pasado. La nueva ingeniería constitucional no permitió solucionar el eje de los problemas de gobernabilidad, el conflicto de poderes entre el poder ejecutivo y el poder legislativo, entre el Presidente de la República y el Congreso. Casi una década más tarde, en 1997 nuevos y viejos actores políticos se reunían para redactar una nueva constitución que buscaba solucionar los problemas de gobernabilidad democrática a los que habían tenido que hacer frente los distintos gobiernos. La Constitución de 1998 se inauguraría de la mano de un nuevo gobierno. La Democracia Popular, que al igual que durante la redacción de la Constitución de 1979 había tenido una fuerte influencia en el nuevo marco constitucional, había ganado las elecciones presidenciales de 1998. El presente documento tratar de narrar el resto de la historia, los 17 meses de gobierno del líder demócrata popular y ex alcalde de Quito, Jamil Mahuad y su capacidad para afrontar los desafíos del sistema político ecuatoriano.