Descripción:
La amistad y gratitud, esas deidades á quienes he rendido siempre culto especial, me obligan á toma la pluma en estos solemnes instantes en que Cuenca, la ciudad de los poetas, se cubre de luto, y la Iglesia ecuatoriana deplora, y con justísima razón, la eterna partida de uno de sus hijos más conspicuos.