Descripción:
El 2002 estaba señalado en el calendario audiovisual español como el año del cambio.
La tecnología digital sería obligatoria para la emisión de los canales. La digitalización traería consigo esa televisión que marca el último tramo del denominado narrowcasting, y con ella la tan prometida "televisión de la abundancia". Una televisión llena de canales temáticos y de interactividad. Nacería la nueva era televisiva en la que, junto a la información y el entretenimiento, llegaría también una posibilidad de realizar un buen número de servicios, gracias a tecnologías complementarias que racionalizarían el consumo televisivo y que supondrían el comienzo del fin de las televisiones generalistas.