Descripción:
Escribo este artículo motivado por la misma hipótesis que me llevó a publicar "El Striptease de la Escuela" (Editorial Pec, San José, Costa Rica) y "Educación como Praxis Politica" (Siglo XXI, México) es decir, la hipótesis de que la educación formal está sumida en un atolladero, del que no podrá salir mientras no se comprenda y valore la dimensión socio-política de la educación. En modo alguno la enseñanza a distancia puede ser vista como un proyecto alternativo de educación, por más que muchos autores se esfuercen en proclamarlo a los cuatro vientos. Uno de los libros
más recientes sobre el tema: "Universidad sin clases" de Casas Armengol es una clara manifestación de ese afán de ver en la "Educación a Distancia" una respuesta capaz de atender "con la rapidez y eficiencia necesarias a las nuevas funciones, roles y alcances" (Miguel Casas Armengol, "Universidad sin clases:Educación a Distancia en América Latina", OEAUNA- Capeluz, Venezuela, 1987) que demandan las urgencias educativas de los pueblos latinoamericanos.