Descripción:
La creación del Ministerio de Desarrollo Social de Uruguay, en el año 2005, significó un cambio en el abordaje de las políticas sociales en el país. El Estado uruguayo, propuso la creación de este Ministerio con el propósito de generar una batería de programas sociales que aborden problemáticas complejas de un sector de la población que se encontraba en procesos de segregación y vulneración de derechos.
Es en este contexto que surge el Programa Cercanías, configurándose desde sus inicios como un esfuerzo interinstitucional para la atención prioritaria de familias en situación de extrema pobreza a través de la acción articulada de los organismos e instituciones para el efectivo acceso a prestaciones, derechos y servicios (2013, Cercanías). El programa se propone mediante el acompañamiento familiar y el trabajo de proximidad con las familias apoyar y propiciar el acceso a los derechos sociales y prestaciones, a los cuales las familias no están accediendo. Cercanías desde su origen, se define como una propuesta innovadora de abordaje integral que busca y promueve la participación activa de las familias, que han sido expulsadas de la sociedad por las dinámicas del mercado. Bajo el enfoque de la problematización de la pobreza como fenómeno multidimensional y multicausal, y como funcionaria de este programa, me propongo analizar si el mismo ha oficiado como un actor de desarrollo humano para las familias participantes en el periodo 2015-2020.