El mundo actual se ha hecho casi completamente dependiente de la tecnología por lo que ha sido necesaria una adaptación sistémica a los distintos sucesos que han ido cambiando; en este contexto los Estados Unidos implementan nuevas estrategias, mecanismos e innovaciones militares dentro de los estudios estratégicos, principalmente a partir de los acontecimientos del 9/11 del año 2001. La presente investigación propone en este sentido el análisis minucioso del proceso de la vigilancia líquida cómo factor estratégico empleado en la política de ciberdefensa de los Estados Unidos en la primera década del siglo XXI, a fin de identificar qué es la vigilancia líquida como factor estratégico en el nuevo ambiente global; explicar cómo se ha convertido en una herramienta eficaz para fomentar la ciberdefensa y comprender los procesos a partir de los cuales la vigilancia sólida se transforma en vigilancia líquida. Esta investigación genera nuevos debates dentro de la academia, en el campo de la misma seguridad y permite entender los nuevos paradigmas cambiantes del mundo.