Descripción:
En atención a los rasgos que teóricamente identifican tanto a los populismos históricos como a los de última generación, conocidos como neo-populismos, el artículo examina el gobierno de Hugo Chávez intentando ubicarlo tanto en una como en otra modalidad. La conclusión es que, a pesar de su signo militarista por el que no se distinguieron precisamente los viejos populismos, el proyecto chavista replica en gran medida las características de aquellos, sin dejar de reproducir parte de la fisonomía que distingue a las expresiones más recientes de gobiernos y movimientos de este corte en América Latina.